Cuando necesitamos comprar un colchón debemos tener en cuenta varias cuestiones. La más importante es que el colchón debe adaptarse a la persona que dormirá en él y no al contrario. Por eso, si eres de los que sufres alguna dolencia relacionada con dolores de lumbago o ciática tendrás que tenerlo aún más en cuenta. Por eso, vamos a contarte qué colchón te viene mejor según la dolencia que tienes:
- Si padeces de artrosis, lo mejor es elegir un colchón con firmeza intermedia y una buena adaptabilidad en el descanso. Además debe aportar sensación de flotabilidad, corrigiendo y alineando en todo momento la columna vertebral. Los colchones de viscoelástica son los mejores para estos casos.
- Si la fibromialgia es tu compañera deberás apostar por un colchón de firmeza media que se adapte a tu cuerpo. Además su grosor no deberá ser menor a 15 cm y deberán ser de tejidos que aseguren una gran transpirabilidad y oxigenación.
- Las hernias lumbares son muy frecuentes entra la población y un mal colchón las empeora. En este caso un buen colchón son los que son más adaptables y tienen una sensación de suavidad extra.
- Los dolores de caderas son muy habituales y muy molestos. Para mejorar el sueño en caso de que sufras de esta dolencia lo mejor es elegir colchones que no ejerzan mucha presión. Estos son los colchones de espumación, los de látex o los acolchados viscoelásticos superior a 2 cm.
Eso sí, lo mejor es que, si sufres de alguna de estas dolencias y no descansas bien, lo mejor es que si has pensado cambiar de colchón vayas a una tienda de confianza con profesionales que sepan aconsejarte qué colchón se adapte mejor a tu dolencia.